“Si no tienes talento por lo menos échale huevos”, reza en la espalda una de las camisetas que vende Héctor Moro y cuyo dinero dona a diferentes asociaciones que luchan contra el cáncer u otras enfermedades. A nuestro juicio, este atleta de Pola de Laviana tiene talento. Poca gente puede correr 24 maratones en un año bajando en todas de menos de tres horas, pocos pueden completar 180 kilómetros en bicicleta sobre un rodillo en poco más de cuatro horas y probablemente nadie convierta cada una de estas gestas en dinero que dona desinteresadamente. Para nosotros eso es talento y, por supuesto, le sobran huevos.
A gente así hay que abrirle las puertas de donde sea y ayudarle con lo que sea. En El Requexu tuvimos claro que la sidrería se convertiría en su territorio para lo que quisiera y que nuestro cachopo no sólo llevaría su nombre sino que por cada uno que despacháramos le donaríamos un euro.
El domingo 18 volvió a demostrar su talento y sus huevos. 180 kilómetros en un tiempo estratosférico y 1.050 euros recaudados gracias a las aportaciones de todos los que nos acompañasteis en la sidrería que menos de 24 horas después de la gesta ya ingresó en la cuenta corriente de Asempa (Asociación de Enfermos Musculares del Principado de Asturias).
Nosotros le entregamos 370 euros (270 euros que nos dio Coca Cola cuando se enteró de la iniciativa y 100 euros de los últimos cien cachopos vendidos). Al día siguiente, Héctor Moro nos recordó una frase de Eduardo Galeano: “mucha gente pequeña, en lugares pequeños, haciendo cosas pequeñas, pueden cambiar el mundo”.
Ayer fue otro gran día.
Nota: muchas gracias a todos los medios de comunicación que se hicieron eco del evento.
Así termina Héctor Moro Díez...
Posted by Sidrería El Requexu on domingo, 18 de febrero de 2018